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viernes, 6 de febrero de 2015
Una puesta en escena, una declaración de intenciones, un humedal de tradiciones.
El marjal de Gandia es un terreno húmedo con un gran valor medioambiental que alberga numerosas especies endémicas de la Comunidad Valenciana, tanto de flora como de fauna; un espacio protegido que, a pesar de encontrarse completamente transformado, delimitado por los naranjos y en rápida y clara regresión, en las últimas décadas había gozado de una relativa tranquilidad. Se habían hecho numerosos esfuerzos por parte de la administración y los gobiernos locales para la conservación y ampliación del área protegida. Pero todos estos esfuerzos ha sido un espejismo, ya que detrás de ellos estaba la idea de un parque de golf situado en este enclave único.
la marjal de Gandia ocupa unas 450 ha de las 1.225 ha del marjal de la Safor. Integrada dentro de los términos municipales de Gandia, Xeresa, Xeraco y Tavernes, el marjal es una reserva de fauna y flora con un importantísimo valor ecológico y botánico, donde se desarrollan plantas endémicas, especies acuáticas únicas y lugares de reproducción y cría tanto de aves migratorias como de nidificantes. El marjal es un lugar que hay que conservar por su valor científico, pedagógico, cultural, recreativo y paisajístico, además de ser un importante punto de descarga de los acuíferos y un imprescindible regulador de la calidad de las aguas, absorbiendo y fijando sustancias contaminantes. Y por último, desde un punto de vista más material, necesitamos el marjal para evitar la salinización de los acuíferos utilizados para el consumo humano de la playa de Gandia, no lo olvidemos, uno de los motores económicos de la comarca. Esta marjal esta en continuo peligro de desaparición, y ya que las instituciones se empeñan en realizar sus transacciones económicas sobre terreno publico solo nos queda un arma, la de la población y su amor por esta tierra.
En estas entradas vamos a tener la oportunidad de enseñar lo que se ve y lo que no se ve de este territorio, su historia, su importancia ecologica y biologica, su transformacion a lo largo del tiempo y arrojaremos algo de luz sobre el continuo acecho al que se ve sometido este trozo de tierra que es mas que eso, es un trozo de nuestro planeta que vale la pena y los que lo amamos haremos lo propio, protegerlo con nuestro amor.
Os damos las gracias con una fuerte bienvenida a este pequeño viaje y mucha ilusión.
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