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lunes, 16 de marzo de 2015

5. Con la iglesia hemos topado.

Continuando con nuestra visita al parque Natural de Ses Salines, situada a la derecha, en medio de una larga recta, encontraremos la iglesia de Sant Francesc de s'Estany.
No es difícil de encontrar, ya que se encuentra pegada a la carretera que une el pueblo de Sant Jordi con las playas de Ses Salines y Es Cavallet.


Ésta modesta iglesia fue construida en el siglo XVII para atender a los trabajadores de la sal, al igual que la cercana capilla de Sa Revista, después de que la Corona española recuperara la explotación de los estanques ibicencos.

Se trata de una construcción muy sencilla, que en la fachada luce un escudo real en piedra, preceidad de un pequeño patio. Se encuentra prácticamente pegada a los estanques.

Junto a ella, observarán una llamativa escultura en bronce de un salinero, homenaje a los trabajadores que durante tanto tiempo extrajeron y transportaron la sal sobre sus espaldas.

                                         

La figura, obra del artista pitiuso Pedro Hormigo, fue fundida en Eibar (Guipúzcoa) e inaugurada el 7 de abril de 2007.

La pieza del salinero aislada tiene una altura de 1,85 metros y contando el pedestal mide 2,15 m.  Como sucede con el resto de la obra de Hormigo, el vacío tiene un peso importante en la imagen, ya que la pieza se ha construido como un envoltorio de un cuerpo sin contenido.
Las facciones de la cara no están marcadas al objeto, según explicó el escultor en la presentación de su obra, de "rendir un homenaje a todos los salineros que , durante siglos, trabajaron en la extracción de la sal".

La escultura está inspirada en la imagen más representativa de los salineros ibicencos, aquella en la que se ve a un trabajador con un cesto en la cabeza.

Dando un paseo, visitaremos la capilla de Sa Revista, construida como oratorio en el siglo XVIII para las personas que trabajaban en duras condiciones en las salinas de Ibiza.

Situada muy cerca de la playa de Es Cavallet, rodeada de naturaleza, asoma entre verde pinar y espinosas chumberas, una blanca inmaculada capilla dentro de una diminuta aldea de graciosas casas.
                                       


En su altar tiene una imagen religiosa de la virgen de Fátima, y posee en su fachada un escudo de Castilla y León. Desde sus puertas son fácilmente visibles los cercanos estanques de las salinas, con su peculiar paisaje llano y cuadrado.




Próxima entrada: 6. Animaleando en el Parque Natural de Ses Salines de Ibiza. Click.





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