El camino al conocimiento.

El Parque Nacional cuenta con varias infraestructuras de uso público:


Centro de visitantes: Antes de iniciar la visita al parque, es aconsejable la visita al Centro de Visitantes donde, mediante seis salas de exposición y audiovisuales, se puede obtener una amplia información sobre el espacio natural y su entorno, así como información de servicios u otros aspectos que se desee conocer. Su horario varía según la época del año, y existe un servicio de recorridos guiados que se solicitan en el centro. Asimismo, el Molino de Molemocho contiene un centro de interpretación donde se puede conocer, en diferentes momentos de la historia, la relación entre el hombre y el humedal.
　

 
 
 
















 
 
Paneles en el Centro de Interpretación. Abajo diorama de restos de animales.

La visita a las tablas de Daimiel se realiza, exclusivamente, a través de tres itinerarios peatonales que bordean el espacio protegido o nos adentran en él, mediante pasarelas de madera:

Itinerario de la Laguna Permanente: De unos 800 metros de longitud, conduce a una laguna desde cuyos observatorios se contemplan, según la época del año, distintas aves acuáticas.

Itinerario de la Isla del Pan: Con una longitud de 2000 m., discurre por pasarelas que unen varias islas a lo largo del recorrido. Desde ellas se pueden observar muestras de su fauna y flora. En la Isla del Pan encontramos el Bosque de los Tarayes, la formación arbórea más importante del parque. Este itinerario conecta, opcionalmente, con la Laguna de Aclimatación, donde se encuentran una amplia representación de las anátidas del Parque Nacional.

Itinerario de Prado Ancho: Bordea el espacio protegido a través de una senda de 1.500 m., con desviaciones a cuatro observatorios faunísticos, y termina en una torre elevada desde donde se goza de una excelente panorámica.

 

De arriba a abajo: Pasarela de madera sobre las Tablas, Antigua Casa del Forestal del Parque y  Bosque de los Tarayes.

Respecto a otros servicios, próxima al centro de visitantes existe un área recreativa con bancos, mesas y sombras con vistas panorámicas a la zona inundada. Dicha área se encuentra situada sobre una masa adehesada de encinas o carrascas(Quercus ilex). El espacio protegido también cuenta con un parking para vehículos con una gran capacidad de cabida, donde cabe la posibilidad de, autorización previa, se puede pernoctar en vehículos aptos para dicha actividad(Autocaravanas), única forma de hacer noche en el Parque Nacional. El centro de visitantes dispone de aseos.