En este sendero, por el lado sur del macizo, empiezo la ascensión entre un bosque de enebros con una baja niebla sin saber realmente a donde voy ya que pierdo la referencia con la niebla pero esto lo hace mas interesante.Es una ruta que no aparece en las guias y por tanto es menos conocida.
Os cuento un poco sobre este pequeño cerro, está situado en el piedemonte de la sierra de Guadarrama y se le denomina un monte-isla por su ubicación aislada en una llanura y a la vez rodeado por tres poblaciones como son Moralzarzal, Becerril de la sierra y Collado mediano que aprovechan las llanuras hasta la próxima elevación montañosa como puede ser el Cerro del Castillo al noroeste o la sierra del Hoyo de Manzanares al sur. En esta subida se puede observar su potente foco de atracción para las aves como el buitre y el milano además de las urracas.
Continuó observando los enebros que actúan como monte bajo dando refugio a los conejos que atraviesan a la carrera el sendero por el que camino. Se oye el viento y se nota la humedad en el ambiente además de los 5º celsius que provoca un dia de febrero. Es genial ver como esta la naturaleza cuando las condiciones meteorológicas son más adversas. Todavía no se si estos son repoblados o pertenecen a esta zona. Esta ladera sur tiene menor cantidad de arbolado que la parte norte pero cuenta también con más plantas aromáticas como el cantueso, y tomillo.
Fijandome en esta foto diría que es por la pobre cantidad de suelo fértil de que disponen ya que se trata de una formación montañosa de granito y gneis el cual aflora por doquier aunque la vegetación ha sabido aprovechar los huecos rellenados por la materia orgánica depositada a través de los años. Esta es la parte baja del macizo el cual tambien esta mas utilizado por el ganado extensivo. Aunque hoy parece que están recogidos en sus granjas. Al pie del macizo se nota sus huellas en la formación de la vegetación sobre todo de las encinas recogidas en la parte baja por sus brotes más tiernos dándoles una forma muy peculiar.
Os cuento un poco sobre este pequeño cerro, está situado en el piedemonte de la sierra de Guadarrama y se le denomina un monte-isla por su ubicación aislada en una llanura y a la vez rodeado por tres poblaciones como son Moralzarzal, Becerril de la sierra y Collado mediano que aprovechan las llanuras hasta la próxima elevación montañosa como puede ser el Cerro del Castillo al noroeste o la sierra del Hoyo de Manzanares al sur. En esta subida se puede observar su potente foco de atracción para las aves como el buitre y el milano además de las urracas.
Continuó observando los enebros que actúan como monte bajo dando refugio a los conejos que atraviesan a la carrera el sendero por el que camino. Se oye el viento y se nota la humedad en el ambiente además de los 5º celsius que provoca un dia de febrero. Es genial ver como esta la naturaleza cuando las condiciones meteorológicas son más adversas. Todavía no se si estos son repoblados o pertenecen a esta zona. Esta ladera sur tiene menor cantidad de arbolado que la parte norte pero cuenta también con más plantas aromáticas como el cantueso, y tomillo.
Fijandome en esta foto diría que es por la pobre cantidad de suelo fértil de que disponen ya que se trata de una formación montañosa de granito y gneis el cual aflora por doquier aunque la vegetación ha sabido aprovechar los huecos rellenados por la materia orgánica depositada a través de los años. Esta es la parte baja del macizo el cual tambien esta mas utilizado por el ganado extensivo. Aunque hoy parece que están recogidos en sus granjas. Al pie del macizo se nota sus huellas en la formación de la vegetación sobre todo de las encinas recogidas en la parte baja por sus brotes más tiernos dándoles una forma muy peculiar.
En mi ruta me cruzo con pocas personas, ya que un dia como hoy no acompaña a todos. Pero hay dos corredores de montaña que me pasan uno hacia arriba y otro que ya ha subido por el otro lado hacia abajo con su trote. un par de bicicletas de montaña pedal a pedal y un señor con su perro que tiene el detalle de sujetarlo a mi paso y soltarlo después sin saber el mismo que puede alterar a la pequeña fauna de la zona.
Al ver este objeto ya me caben dudas de si tiene algún tipo de protección. Pienso que cuando repoblaron esta zona hicieron terrazas y una noche de fiesta alguno se equivocó y acabo aquí arriba. O quizá sean restos de antiguos pobladores que requiere de su conservación, no se yo diria que es un seat málaga. Está muy cerca de la pista forestal y pienso que aun metiendo una grúa hasta aquí lo podrían sacar pero a lo mejor es que no lo han visto.
Continuo el paseo y llegó a la cima de 1330 msnm cambia la vegetación aquí arriba son pastos o zona sin arbolado ya que sopla un viento fuerte. Todavía se conserva una torre de telégrafo óptico del siglo XIX y formaba parte de una cadena de torres que mantenían contacto visual entre sí y hacía señales luminosas a otras torres situadas en macizos como en Torrelodones o Navacerrada para comunicarse. Esta es una de las pocas que se han conservado y hoy dia se puede visitar ya que ha sido restaurada en 2008 siendo la torre número 5 de la linea de Castilla. Continuamos el recorrido hacia la ladera norte que en la foto se puede apreciar mayor cobertura arbórea de pino silvestre en las capas altas y pino carrasco o halepensis en las capas bajas. Aquí sí se aprecia con más claridad su repoblación en terrazas y con amplio espacio entre ellas aunque forman un bosque espeso mas sombrio.
Es muy curioso que en la parte alta oía llover pero solo había niebla, hasta que me percate de que esta se condensaba en las acículas de las frondosas coníferas y provoca su caída en forma de lluvia. El perfecto ejemplo de que las masas forestales provocan lluvia o mayor humedad en el ambiente ya que recogen la humedad del aire.
Continuo bajando y me encuentro con ciclistas que equipados con casco y protecciones inician su descenso prácticamente en línea recta salvando los obstáculos y provocando un poco de erosión.
Pero mi sorpresa llega cuando salen dos motos de campo de haber atravesado un coto privado de caza y continuaron su ascensión con todo el ruido del mundo como si fuera una carrera y por supuesto una fuerte erosión del terreno aunque cada uno disfruta del monte a su manera.
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