El bosque de La Vallesa es un espacio natural protegido desde el 2006, al cual le dieron la máxima figura de protección posible según la legislación autonómica, que es la de Parque Natural. La idea surgió de la sociedad civil hace una década, de las asociaciones de vecinos, colectivos ecologistas y ciudadanos, que empezaron agrupados en una coordinadora para defender dicho bosque, tras el gran incendio del 94 y acabaron levantando vista.
Se encuentra dentro del Parque Natural del Túria, declarado mediante el Decreto 43/2.007, del 13 de abril y cuyo Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) se aprobó en abril del 2.007 a través del Decreto del Consell de la Generalitat.
La zona de la que os quiero hablar se encuentra en el municipio de Paterna, tiene una delimitación de 1500 Ha, está situada en la provincia de Valencia, concretamente en la comarca de L´Horta, en la margen izquierda del río Túria a 5,2 km de la ciudad de Valencia, limita al Norte con Bétera y Godella, al Este con Burjasot y Valencia, al Sur con Quart de Poblet y Manises y al Oeste con Riba- Roja del Túria, L’Eliana y San Antonio de Benagéber.
El principal uso del suelo que se extiende en la mayor parte del paraje es para uso agrícola, siendo los principales cultivos los cítricos y las hortalizas. Todo esto le confiere un alto valor por sus riquezas en términos de biodiversidad y valores tradicionales, y, además, gracias a la agricultura, al paso del río Túria, la zona boscosa y el humedal de La Vallesa que recoge las aguas de los barrancos y acequias más próximas, hacen que la calidad del aire no sea mala y contenga muy bajas las concentraciones de contaminantes. El bosque albergó durante años otras especies invasoras como los chumberos, algarrobos o almendros, debido a la importante actividad agrícola del siglo XVII, mientras que en el XVIII la masa forestal se vio afectada por la industria maderera. Afortunadamente, en el XIX la actividad humana abandonó los recursos tradicionales, permitiendo la recuperación progresiva del bosque y, con ello, el aumento de los incendios.
Es una joya medioambiental a tan sólo quince minutos de la ciudad, con multitud de rutas y senderos para todo tipo de visitantes. Es un enclave de gran diversidad ecológica y paisajística, muy bien conservado y limpio, algo que me resultó sorprendente dada la presión urbanística que le rodea. Es un nexo de unión entre la civilización y la naturaleza.
El bosque de La Vallesa cuenta con un alto valor arqueológico e histórico, tanto es así, que es considerado Patrimonio Natural. El bosque contiene un yacimiento del Mioceno marino con cerca de 60 especies determinadas de foraminíferos (organismos unicelulares que viven en el mar), moluscos y crustáceos que nos indican la presencia de mar en la zona, además del poblado de la Edad de Bronce, La Lloma de Betxí, una red de trincheras y fortificaciones de la guerra civil. También se puede visitar el Mirador de la Reina, desde donde se pueden observar los aprovechamientos hidráulicos que se le han realizado al río Túria, como el azud de la acequia de Moncada.
Cada vez que voy por estos sitios me siento como si me hubiera desplazado a unos cuantos kilómetros de Valencia y estoy a tan sólo diez kilómetros, esto me hace disfrutarlo mucho más.
Entre todos tenemos que mejorar su protección y potenciarlo para un mayor disfrute de la ciudadanía.
Gran parte de su extensión es de propiedad privada, de la familia Trénor, una de las familias más conocidas en la burguesía valenciana. Dicha familia es la propietaria de la mayor parte del bosque de La Vallesa desde finales del siglo XIX. Durante años hubo cierta flexibilidad para poder acceder a la propiedad, pero actualmente desde la declaración de Parque Natural la negativa fue rotunda. En la actualidad la Conselleria de Medio Ambiente logró un convenio con la familia aristocrática para poder participar en visitas oficiales guiadas y organizadas en grupos reducidos de vecinos y descubrir parajes, como el lago y el puente de acceso.
Entre los integrantes de esta familia la persona que más se preocupó y trabajó por estas tierras fue Enrique Trénor Montesinos, dedicó mucho tiempo y llevó una gran actividad al mejoramiento y cultivo de sus fincas en La Vallesa, a la vez que una intensa actividad laboral en toda Valencia. En 1923 recibió al rey Alfonso XIII con la intención de “que viera lo que era una explotación agraria modelo”.
Os animo a continuar descubriendo el Parque Natural de la Vallesa mediante las siguientes publicaciones:
Bibliografía:
- Fotografías propias del autor.
- www.parquesnaturales gva.es
- www.paternaahora.es
- www.levante.es
- www.la vanguardia.es
- www.lasprovincias.es