Los Gancheros del Alto Tajo

 Siguiendo con el hilo del libro de Sampedro, donde se enamora y describe a la perfección a los moradores de las tierras del Alto Tajo, vamos a hablar de los gancheros.

Los Gancheros son o más bien eran personas dedicada a un oficio desaparecido que consistía en el transporte de troncos de madera (maderadas) flotando aguas abajo por el río Tajo. Las expediciones comenzaban en el curso alto del río, donde se cortaban árboles que tuviesen unas dimensiones mínimas, y concluían en Aranjuez. 

Fuente: Blog viviendo nueva sierra. Imagen del trabajo de los gancheros.

Los gancheros transportaban elevadas cantidades de troncos sueltos, a diferencia de los nabateros, que ataban los troncos para formar almadías. 

Al frente de la ganchería se encontraba el «maestro de río», quien dirigía a todo el grupo de gancheros, compuesto fundamentalmente por tres compañías: la delantera, la de en medio y la zaga. Todos ellos llevaban como única herramienta un bichero. 

Fuente: Blog viviendo nueva sierra. Imagen herramienta de los gancheros.

La pericia del ganchero y su conocimiento del río eran de vital importancia para entregar la mercancía en su destino sin percances.

Fuente: Blog viviendo nueva sierra. Tareas previas al inicio de la bajada.

En el río Tajo se estuvo acarreando madera mediante este modo durante cinco siglos, hasta la irrupción del transporte por carretera ya entrado el siglo XX. En 1961 José Luis Sampedro publicó su novela que lleva por título "El río que nos lleva", en la que los protagonistas son los gancheros del Tajo. En 1989 fue llevada al cine por Antonio del Real.

Dejo un enlace para que podáis apreciar el duro trabajo de los gancheros, fragmento de la película de Antonio del Real.

El acarreo de troncos por vía fluvial fue usual en muchos ríos de Europa en la época preindustrial, dado que los cursos de agua permitían transportes rápidos y baratos de materiales muy pesados como la madera. 

Aparte del río Tajo, el acarreo de madera se dio también en otros ríos españoles como el Turia, con apeaderos en la localidad valenciana de Ademuz, el Gállego, en el Pirineo Aragonés, o el Segre, en el Pirineo Catalán. En este último la profesión de ganchero llegó a ser de máxima importancia y forma parte de la cultura popular de algunas comarcas de la provincia de Lérida.

El pueblo de Zaorejas, en el alto Tajo, cuenta con el Museo de los Gancheros. 

También encontramos el Museo Regional de los Gancheros y la Madera de Cañizares, en el pueblo de Cañizares, Cuenca.

En la actualidad para no perder el origen de estas tradiciones se realizan varias actuaciones para demostrar el gran trabajo de estos hombres y mujeres.

La Fiesta Ganchera, que cada año se celebra a finales del mes de Agosto de forma itinerante en Peralejos de las Truchas, Peñalén, Poveda de la Sierra, Taravilla y/o Zaorejas, viene e rememorar la tradición del ancestral oficio de los gancheros del Alto Tajo, fiesta que está declarada de Interés Turístico Regional.