Eran multitudes los apicultores y apicultoras, que tradicionalmente basaban su actividad en la obtención de miel de cítricos y plantas aromáticas por las proximidades del río barxeta ya que era ahí donde más se concentra la vegetación auxiliar y por ello las abejas en busca de comida aunque en la actualidad esta práctica se está perdiendo poco a poco estando al borde de desaparecer por culpa de las leyes establecidas de que no se pueden poner colmenas a menos de 4 kilómetros de un campo de cultivo lo que hace casi imposible poder implantar colmenas por los bajos del territorio teniendo que ir a la alta montaña donde la accesibilidad es mucho peor y las abejas tienen menos agua y alimento.
Colmena tradicional normalmente realizada con madera de pino,roble o surera dependiendo de la zona
En la actualidad aún existen algunos vecinos del municipio que se dedican a la extracción de miel aunque ahora es un trabajo complementario y en la antigüedad su actividad daba muy buen rendimiento económico.
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