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jueves, 18 de noviembre de 2021

Maravillas de la naturaleza

La posición geográfica de la comarca se encuentra entre la meseta castellana (con clima continental), el Atlántico (climas más suave) y el Mediterráneo (más cálido y mucho más seco), convirtiendo a este territorio en un franja de transición y produciendo microclimas locales con diferencias apreciables, derivado de la orientación de las sierras. 

Teniendo en cuenta lo anterior y la diversidad de hábitats que componen La Siberia, se va a ver reflejado en una extraordinaria y diversas vegetación que iremos encontrando en cada uno de los diferentes ecosistemas: 


En los roquedos,  se va a encontrar líquenes de colores llamativos, y en las grietas podemos encontrar alguna encina (Quercus ilex) con porte achaparrado, enebros (Juniperus spp), dedaleras (Digitalis spp), claveles silvestres(Dianthus spp), el ombligo de Venus (Umbilicus rupestri) y alguno helechos.
En la base de los roquedos el bosque dominante es el encinar o los pinos y eucaliptos procedentes de antiguas repoblaciones.


Ombligo de Venus (Umbilicus ruprestri) Foto propia.


En el bosque y matorral mediterráneo constituye la vegetación típica de las sierras de La Siberia, destacando el alcornoque (Quercus suber), quejigo (Quercus faginea) y en las zonas más soleadas la encina (Quercus ilex). En las zonas más frescas, en las que brota el agua de manantiales, crecen arces de Montpellier (Acer montpellier) , fresnos (Fraxinus spp) y almeces (Celtis spp)
En la zona de matorral destaca el madroño (Arbutus unedo) , el brezo rojo (Erica spp) , la cornicabra (Pistacia terebinthus), el labiérnago (Phillyrea angustifolia) y otras especies más escasas como el mirto (Myrtus spp), el torvisco (Daphne spp)o el rusco (Ruscus aculeatus) . Este matorral es muy exuberante en las umbrías y más escaso en las solanas en las que aparecen jaras (Cistus spp), acebuches (Olea europaea) o retamas (Cytisus spp)


Alcornoque (Quercur suber) Foto propia.



Llanuras cerealistas o Pseudoestepas, en este ecosistema la vegetación actual es el resultado de la deforestación sufrida durante el pasado. El pastoreo continuo ha impedido la regeneración de los árboles pero ha propiciado la calidad de los pastizales y matorrales existentes.  Encontramos pastos de gramíneas, retamares, cantuesares y escobonales propios de esta comarca. En los pequeños arroyos podemos encontrar algunas encinas dispersas, sauces (Salix spp), tamujas (Flueggea tinctoria) y adelfas (Nerium oleander)


Retama (Retama Sphaerocarpa) Foto propia.


Cantueso (Lavandula stoechas) Foto propia.


La dehesa se caracteriza por ser un bosque aclarado donde la encina alcanza una densidad media de 50 o 60 árboles por hectárea. En los espacios abiertos crecen pastos de interés ganadero destacando el trébol subterráneo (Trifolium subterraneum), la poa, cebadilla (Bromus spp), orquídea (Orchis spp) , cebolla albarrana (Drimia maritima)  y otras especies de tréboles (Trifolium spp)



 Poa común (Poa pratensis) Foto propia.


La vegetación de ribera presenta un aspecto similar a una galería, donde las copas de los árboles de entrelazan en la parte alta.  El arbolado se compone de sauces (Salix spp) y alisos (Alnus spp) situándose en el mismo cauce ribeño y los fresnos (Fraxinus spp)en las zonas próximas en zonas no inundadas. 
Entre los arbustos que crecen bajo este arbolado destacamos la adelfa que crece junto a zarzas (Rubus spp) y tamujas (Flueggea tinctoria)


 Aliso (ALnus glutinosa) Foto propia.



El olivo es uno de los árboles más cultivados en la comarca. Los valles de suelos fértiles son elegidos para establecer las huertas, en las proximidades de los pueblos. Allí se cultivan árboles frutales y hortalizas y también vides con las que se elaboran cada año sus vinos.


Olivar (Olea europeae) Foto: seobirdlife


Las condiciones en la turbera son tan particulares que no permiten la existencia de las bacterias encargadas de obtener nitrógeno y haces que estos ambientes sean pobres en nutrientes. Sobre estos peculiares suelos crecen especies singulares como los esfagnos (Sphagnus spp)  y el brezo de turbera (Erica tetralix)  . La aulaga gatiña (Genista anglica) , algunos narcisos (Narcissus spp), la orquídea de turbera y las mansiegas (Carex flacca) son otras especies típicas de estos ecosistemas.


Brezo de turbera  (Erica tetralix) Foto: José Q



Todos estos pequeños ecosistemas crean una compleja red de organismos interrelacionados que nos regalan las grandes maravillas de la naturaleza.

En la próxima entrada nos adentraremos en la emocionante aventura de como ha ido evolucionando este increíble lugar...




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