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martes, 26 de noviembre de 2019

SUMÉRGETE EN LOS BOSQUES ATLANTICOS DE LA SIERRA DE ARALAR, TE SORPRENDERÁS


A través de este blog, vamos a descubrir la sierra de Aralar, sumergiéndonos en sus preciosos y variados bosques, descubriendo su historia, sus monumentos, sus costumbres, su fauna y flora. Lo vamos a hacer en gran parte a través de los bosques atlánticos de mi pueblo, Etxarri-Aranaz, el bosque de “Bekobasoa”, bosques que están dentro de los límites de este maravilloso espacio denominado “Sierra de Aralar” y que son muy representativos de los hábitats naturales del mismo.


Desde el año 2014, la “Sierra de Aralar” es designado como Zona Especial de Conservación (ZEC), una vez que previamente fuera aprobado por la comisión europea como “Lugar de Importancia Comunitario (LIC) y perteneciera a la red ecológica europea Red Natura 2000, con lo que hay un compromiso de salvaguardar los hábitats naturales y especies de flora y fauna silvestre declarados de interés comunitario.


Los hermosos bosques de Aralar y las zonas de pastos hacen que esta sierra tenga un gran valor naturalístico: hayas, robles, tejos, fresnos, castaños y avellanos se levantan junto a pastizales por los que deambulan ovejas latxas, yeguas y caballos. Aunque la naturaleza es la protagonista en la sierra de Aralar, la piedra, la historia y las costumbres también juegan un papel importante. Nos ha dejado multitud de dólmenes diseminados por toda la sierra, calzadas muy antiguas, ermitas como la de San Adrián en Etxarri, Aunque, sin duda, el monumento más destacado es el santuario medieval de San Miguel de Aralar, lugar emblemático en cuyo interior se conservan las cadenas que según la leyenda llevaba Teodosio de Goñi como penitencia por haber matado a sus suegros, víctima de un engaño del diablo y de las que se vio liberado al invocar a San Miguel venciendo así al dragón de Aralar.
Por otro lado, incidiendo en los bosques de Etxarri Aranaz, decir que son unos bosques vivos, de gran tradición y de uso por parte de la población local, en los que  antiguamente el ganado formaba parte de los mismos, y en los que a día de hoy, se utilizan como mero ocio y disfrute, en los que la gente pasea a través de ellos para relajarse, admirar el paisaje o simplemente, aprovecharse del paraíso micológico que representa recogiendo hongos y setas u otro tipo de frutos silvestres.
Todo esto lo vamos a descubrir a través de las 7 entradas del blog que al final del texto estarán disponibles. Quisiera también hacer un pequeño guiño a mi tío Axio y mi a padre, recordando aquellos maravillosos paseos que, cuando era pequeño, dábamos cada domingo por la mañana, cada semana por un recorrido diferente, y a través de los cuales, mi tío iba recitando los nombres de los lugares toponímicos por los que transitábamos, como si cada rincón del bosque tuviese identidad propia. Precisamente, hace unos pocos años ha habido una iniciativa preciosa por parte del ayuntamiento y es la de colocar en cada lugar del bosque correspondiente una piedra con el nombre toponímico tallado. En algunas de las entradas, haré también referencia a estos nombres poniendo una foto de las piedras talladas que los representan.



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