martes, 31 de enero de 2017

Para algunos piedras, para otros un tesoro


“EL CASTELL DELS ALCALANS”

En esta foto, lo que a simple vista se puede ver son rocas, simples piedras, pero para los que conocen su historia y han pisado ese suelo puede ser un tesoro. Estamos delante los restos del castillo de los “Alcalans”, una fortificación medieval que se encuentra en Montserrat (Valencia), en las proximidades del río Magro, en un paraje denominado Els Castellars. Se localiza sobre un espolón o cuerda de ladera, que separa las diferentes depresiones o barrancos por donde se produce la escorrentía de aguas de una vertiente, que forma el valle de los Alcalans (del que toma su nombre), al este, que es el lado más accesible y en el que se desarrolla el sistema defensivo. Yo lo conocí de pequeño, en una visita con la clase, no recuerdo bien ni la edad que tenía pero no llegaba a los 10 años, pero recuerdo que fue un gran día, nada más llegar almorzamos todos juntos y nuestro profesor nos sentó formando un círculo y nos empezó a contar historias y batallas que tuvieron lugar por la zona. Desde ese día siempre que puedo me acerco ya sea con amigos o solo a dar un paseo y contemplar aquello que fue.
El Castillo debió estar construido con roca calcárea, y debía presentar un doble amurallamiento con torres que reforzaban los flancos. Los restos encontrados en la zona, indican la relevancia que la fortaleza de Alcalá debió alcanzar en su época. Aún puede distinguirse que la estructura se articula en dos recintos a los que normalmente se denominan recito superior e inferior, teniendo en cuenta su localización topográfica. El recinto superior (llamado Alcazaba por algunos autores o torre del Homenaje o Celoquia por otros), debía tener, como era costumbre, un marcado carácter militar y residencial simultáneamente. Presentaba una planta rectangular, con patio a cielo abierto, y se completaba el conjunto con un práctico aljibe, así como otras dependencias, que son motivo de estudio todavía.
Por su parte, el recinto inferior, presentaba una subdivisión en dos partes, de un lado un gran Albacar que rodeaba el recinto superior por el norte, oeste y sur; mientras al este existía una liza, que se encontraba defendida por un antemuro, alero o muralla, del que se han conservado restos que alcanzan los tres metros de altura.
Respecto al período de su construcción, ésta parece ser se llevó a cabo al menos en dos fases constructivas, una primera, que podría considerarse como la fundacional, que es la más antigua, la que se inició en el siglo XI, asociada a la taifa de Valencia; y una segunda etapa,. Iniciada en el siglo XII y que se extendería hasta el siglo XIII, coincidiendo con el periodo almohade, en la que se llevaría a cabo obras de refuerzo del sistema defensivo, sobre todo en la zona este del castillo ya existente.
El castillo se considera de origen árabe, posiblemente (atendiendo a los restos de cerámica que se han encontrado en las excavaciones arqueológicas llevadas a cabo) sobre un asentamiento íbero anterior. Es considerado como una muestra de la fisionomía de un típico castillo o fortificación islámica, pese a que actualmente sólo quedan restos (algunos lienzos de lo que fueron sus murallas, así como los basamentos de las que fueron sus torres) de lo que fue en su día fue un importante punto de defensa de la zona.

Está clasificado como bien de interés cultural con número de registro ministerial R-I-51-0010504 de 16 de noviembre de 1999. La declaración legal denominada Bien de Interés Cultural es una figura de protección regulada por la Ley 16/1985, de 25 de junio, del Patrimonio Histórico Español, asimismo asumida por las comunidades autónomas, que se encargan de aplicarla.

Os invitamos a conocer nuestro valle y sus alrededores en las siguientes entradas:

No hay comentarios:

Publicar un comentario