jueves, 10 de enero de 2013

IRATI, el bosque encantado

El amigo de este blog y alumno del ciclo formativo de recursos naturales y paisajísticos, Jorge Sanchis nos ha enviado una experiencia de gran relevancia para él y creemos que puede ayudarnos a elegir un buen destino de nuestras escapadas.


"En el año 2000 visité por primera vez el pirineo navarro. Lo que primero me llamó la atención fue el poco tránsito de vehículos por la zona. Era una sensación que no llegué a comprender ya que en tantos otros lugares visitados suele ser lo contrario. Venía del pirineo aragonés y pretendía quedarme unos días en el pirineo navarro con el objetivo de visitar por primera vez la Selva de Irati. Comencé parando en el pueblo de Roncal, famoso por sus quesos. Allí entre en la oficina de turismo y hay que ver que profesionalidad y atención que tuve. Me preguntaron de donde venía y a donde iba y automáticamente me detallaron en un plano toda la gama de posibilidades a realizar durante mi estancia en aquella zona. Al despedirme me dijeron "Que tengas una buena estancia por estas tierras". Esta frase, "me llegó"; hizo que me sintiera como que era bienvenido en aquellas tierras.
Jorge disfrutando de un atardecer en Irati
Siguiendo mi camino en busca de la selva, paré en Orbara a comer y la dueña del local muy educada me preguntó casi parecido a la chica de la oficina de turismo. Al estar este pueblo más cerca de mi objetivo, la mujer me describió con más detalle lo que podía ver e incluso el momento del día más óptimo ya que el sol marca muy bien las escenas de luces y sombras. Vi el río Irati que bajaba muy caudaloso y me gustó mucho el ver que las orillas no se veían debido a la gran cantidad de vegetación existente.
Adentrando en la "Selva"
 Continuando el viaje paré en    el pueblo de Orbaiceta y visité la antigua fábrica de armas (me lo recomendó la chica del restaurante) y de allí al albergue que hay antes de llegar a la selva a por una habitación. En el albergue más de lo mismo, mucha educación, información e incluso interpretación. A la mañana siguiente llegué a la Selva de Irati donde había una garita para acceder a la misma y unas vigilantes se anotaron la matrícula del coche y me dieron varias indicaciones a seguir para la protección del entorno que iba a pisar así como los horarios. Decir que esta selva es la segunda más importante de europa en cuanto a hayas se refiere. Entre la información escrita que había recibido, la información oída que me habían contado y  las ganas con las que iba a ese lugar; no daba crédito lo que mis ojos estaban viendo de la grandiosa belleza de aquel lugar. Visité el Santuario Virgen de las Nieves y me acorde de lo que me informaron sobre la luz de los rayos del sol. Para ver esto, me senté junto a una haya y deje pasar el tiempo esperando a que el sol cayera. Chulísimo recuerdo tengo de aquello y tan contento quedé que a los dos años volví para mostrárselo a otras personas.
Noté enseguida que la población local de aquellas zonas sabe lo que tiene, saben lo que quieren y lo mejor es que lo saben transmitir al visitante sin muchos romances."
Ir es volver.
-       www.irati.org

-       www.turismo.navarra.es

1 comentario:

  1. A lo largo de estos dos años de estudiar Gestión de Recursos me he dado cuenta al intimar con mis compañeros de que no ha sido un puro trámite,de que todos compartíamos la misma ilusión a pesar del esfuerzo, pero ahora que se acaba me queda una sensación de vacío, de tristeza al comprobar que por culpa de la ineptitud y otras cosas va a ser muy dificil que esto tenga continuidad cuando más falta le hace al medio ambiente. Gracias compañeros por estos años tan intensos que nos han demostrado que la vida es algo más.

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