lunes, 26 de marzo de 2012

Canis lupus signatus, "la vieja pelea de siempre"

Ya en las fábulas de Esopo, de donde provienen muchos de nuestros cuentos infantiles, el taimado lobo feroz intentaba, por todos los medios habidos y por haber, comerse a la tierna, dulce e ingenua ovejita. Negro futuro se le auguraba a la especie ovina con tanto bicho malo suelto acechando. Pero, mira tú por donde, el animal que llegó al borde de la extinción fue el lobo y no aquel que llena los bolsillos de unos y los buches de otros.

Tras años de muchos esfuerzos y desvelos públicos y privados, sobre todo privados pues no olvidemos que en este país (como por desgracia en muchos otros) si no patalean hasta la extenuación los mal vistos conservacionistas no se mueve un dedo, se han conseguido recuperar al sur del Duero algunas poblaciones de este lobo nuestro que, mal que les pese a algunos, es un emblema de nuestro país igual que la Alhambra de Granada o el acueducto de Segovia. Y ahora, vuelven a la carga ganaderos y ministros (seguro que algún gestor de coto o cazador también se frota ya las manos) con que deberían permitirnos desde la Unión Europea cazar lobos también en la mitad sur de la península...

                                                                                                ...sin comentarios.

Carmen Flordelís

sábado, 10 de marzo de 2012

Educación ambiental. ¿De qué somos responsables?


¿De qué somos responsables?
Están siendo unos días muy difíciles para la educación ambiental, la medida de presión adoptada por los profesores de anular las actividades extraescolares pone en peligro de extinción a un colectivo de pequeñas empresas que durante años han cultivado la conciencia ambiental de los más pequeños. Nuestras decisiones de hoy nos harán responsables mañana, por lo tanto, si echamos una mirada al futuro, dentro de unos 10 años...
 - ¿Hemos sido los responsables de privar a una generación de una conciencia ambiental adecuada?
 - Hace unos años hablábamos de educación de calidad, cuando llegó el momento, ¿tomamos una decisión que nos hizo perder el rumbo? ¿De qué somos responsables?
 - ¿Hemos sido los responsables de que los animadores y educadores ambientales no existan? ¿Tenemos que volver a empezar?
 - ¿Recuerdas la gente joven que encontraba su primer y apasionado empleo entre la interpretación y la educación ambiental? ¿No es irónico que esta decisión se tome el mismo año en que el Ministerio publica el ciclo formativo de educación y gestión ambiental?.


Tal solo una reflexión: estamos a tiempo, creo que no es una medida adecuada de presión a la administración, debemos buscar otras medidas y no poner en peligro algo por lo que durante tanto tiempo hemos luchado.
A partir de la semana que viene en este blog haremos una encuesta pública sobre el tema. Opina!