viernes, 29 de mayo de 2015

"ESPADÀ", Pasado, presente y futuro

Unas prácticas en el Parque Natural de la Sierra de Espadan en la provincia de Castellón me han permitido conocer y enamorarme de un lugar muy especial. De sus pueblos, de sus paisajes y de su vida en general.

El Parque tiene unas dimensiones de 31.180 ha. Once municipios tienen todo su término incluido dentro del parque, mientras que de algunos otros sólo hay parte.
El reportaje que he preparado pretende describir los aspectos definitorios de este Parque tan singular: el 2º en extensión de la Comunidad Valenciana. El punto de partida de nuestro trabajo se sitúa en el centro de interpretación del Parque en Eslida.

La visita al centro nos proporcionará la información necesaria en cuanto a fecha de declaración del Parque, usos, vida de sus habitantes…Hemos incluido dos entrevistas a guías del centro (Belén Salvador y Chema Rabasa). Belén Salvador es una de las guías del centro.  Una de las labores que realiza en el centro consiste en describir el contenido del centro de interpretación así como ayudarnos a comprender la complejidad de este ecosistema.  Por otro lado, Chema Rabasa (socio fundador de Itinerantur) se dedica a preparar visitas de turismo interpretativo.  En nuestro reportaje nos describe el proyecto que guía su empresa.

Los guías del centro realizan periódicamente rutas interpretativas.  La evaluación positiva que realizan los visitantes garantiza el mantenimiento del parque, así como del centro de interpretación.

No obstante no podemos olvidar que el recurso principal que asegura la viabilidad futura del Parque son las rutas, el patrimonio natural y el cultural. En el reportaje hemos pretendido destacar esta situación.

En cuanto al patrimonio natural cabe destacar que nos encontramos ante el segundo ecosistema con mayor biodiversidad de Europa cuyo aprovechamiento principal es el corcho, extraído del alcornoque (Quercus suber).

Hemos incluido en el reportaje imágenes de algunos de los paisajes más interesantes del Parque, desde los órganos de Benitandús hasta las vistas de la Plana y del Mediterráneo desde el GR36 que se extiende desde La Vilavella hasta Montanejos.

Como conclusión he de decir que el descubrimiento no me ha defraudado dado que ha superado con creces mis expectativas más positivas.  He encontrado un paraje natural sorprendente y cautivador.  He entendido cómo las generaciones anteriores a la nuestra basaban su subsistencia en la explotación de los recursos naturales de la zona y cómo en la actualidad se mantiene de manera sostenible.


¡Visitad Espadà y descubrid su alcornocal! No os defraudará.

Aquí os dejamos un video, pero mejor disfrutarlo en directo, te invitamos a visitar "ESPADÀ".


Enrique Hidalgo

jueves, 28 de mayo de 2015

EL BUIXCARRÓ, NUESTRO PARAÍSO LEVANTINO

Nos encontramos en la finca “Buixcarró”, en el término municipal de Banyeres de Mariola (Alicante), la cual, pertenece a la Fundación de la Comunidad Valenciana Victoria Laporta Carbonell, la fundadora, por quien recibe el nombre la fundación, era una mujer que tenía en su propiedad la finca anteriormente mencionada, y  decidió crear la fundación con el objetivo principal de conservar y restaurar los ecosistemas que allí encontramos. Se trata de una extensión de 655 hectáreas valladas con una amplia biodiversidad, típico del monte mediterráneo en el que se encuentra.

Esta finca es una de las más grandes históricamente de la Sierra de Mariola, parque natural en el que se encuentra, además cuenta con la enorme biodiversidad de la que goza la región mediterránea, siendo una de las más abundantes de todo el viejo continente.

Como dejan ver sus objetivos, aquí se lleva a cabo multitud de actividades de educación ambiental, como se acoge a un gran número de alumnos en prácticas y visitas de estudios cada año. Para todo esto, la finca Buixcarró está equipada con una serie de instalaciones que cubren todo tipo de necesidades interpretativas a la hora de trabajar in situ esta educación ambiental.

 También se realizan trabajos forestales, así como una gestión de la fauna y de cada uno de los recursos ambientales que nos ofrece este Parque Natural, entre los que contamos la apicultura ambiental, el cultivo, el aprovechamiento de leñas, la caza, la recolección de setas, la fotografía de naturaleza, etc.

Uno de los recursos con mayor valor interpretativo de la finca Buixcarró son los muflones, los bovinos salvajes que pueblan la finca son los animales más grandes que podemos encontrar aquí, con la única competencia y predador que supone el hombre.

Los hides, comederos, restos de aprovechamientos pasados, observatorios, senderos, y otros equipamientos, nos ayudan en la interpretación del patrimonio del Parque Natural, en concreto de estas 655 hectáreas.

Además, la fundación cuenta con una serie de convenios con asociaciones y universidades con las que trabaja en continuo contacto y con una relación estrecha, tales como AEFONA, l’Universitat d’Alacant, ASAF y otras.


Aquí encontramos un sitio donde disfrutar del bosque mediterráneo en su más puro estado y con todas las facilidades posibles. A continuación, presentamos un video-documental de El Buixcarró, nuestro paraíso levantino.

 
Pablo García

miércoles, 27 de mayo de 2015

EL RAFOL Y SALEM!!

vista desde "la serreta del Rafol"
En la parte oriental del Paraje Protegido del Benicadell encontramos dos municipios Rafol de Salem y Salem.
El Ráfol de Salem se encuentra a las faldas del Benicadell. Desde este se extiende un brazo de roca, hasta la población denominando este monte La “Serreta del Ráfol” donde predomina la piedra blanca, gris calcárea. Por los lados brota en superficie un nivel subyacente de terreno donde se encuentra la arcilla. Gracias a la arcilla se fundó este municipio hace muchos siglos y parte de su nombre, Ráfol se debe a que fue una originaria minúscula alquería de musulmanes y lo nombraron Raff al-Gïbz, “el obrador de arcilla” (Rafalgeps en documentos medievales). Gracias a este tipo de tierra se justificó la presencia y asentamiento de pobladores en tiempos de Al-Andalus, era la alfarería, la manufactura de ladrillos, barreños y jarras de arcilla, las actividades principales de esta alqueria. Entre los siglos XIV-XIX se encontraba dentro de la señoría feudal de la Hoya de Salem, linaje de los Bellvis, comprendía también los pueblos de Salem y Beniatjar, por lo que se añadió “de Salem”.
Después del año 1.609 fue repoblado por cuarenta familia de colonos, los cuales se dedicaban por excelencia a trabajar el campo para obtener aceite de oliva, vino de secano y además la obtención de seda de los gusanos, alimentados con hojas de morera. Además de trabajar las tejas, ladrillos, barreños y jarras.
Muchos años han pasado pero hoy en día, en el Ràfol de Salem aún persisten estas actividades actualizadas a nuestros tiempos, siendo la economía actual la agricultura y las fábricas de ladrillos.
En Salem, fueron también los musulmanes los que desarrollaron la agricultura y el poblamiento de la Hoya de Salem. Durante los siglos XV-XVI, bajo el dominio feudal de los Bellvís, el pueblo evolucionó dedicándose a la producción de aceite de oliva, a la ganadería llanera para los traperos de comarcas vecinas, entre todos poseían más de 1.000 cabezas de ganado.
Con el tiempo y después de la expulsión de los moriscos, los procuradores del noble Luís Sabata de Calatayud, conde de Real y barón de la hoya de Salem, se dedicaron varias semanas a buscar pobladores, repartirles  casas y tierra, además de negociar con ellos la firma de la carta pobla (19 de julio del 1611).
En el último tercio de siglo XIX y la primera del XX, la artesanía alpargatera daría salida a la difícil situación laboral de muchos vecinos. Gracias a la Guerra Civil y la demanda de calzado para el ejército republicano, la fábrica de los hermanos Alborch sería objeto de un gran empuje productivo. Se pasaría así rápidamente de la manufactura alpargatera a la industria del zapado, consolidada a partir del 1950. En la segunda mitad del siglo XX Salem sería uno de los pueblos más industrializados de la Vall d’Albaida. Donde vecinos del municipio y de alrededor, atraídos por la oferta de trabajo de los hermanos Alborch y de otras empresas familiares de calzado y otras ramas.
La crisis industrial de las últimas décadas, ha llevado a la reconversión con la instalación, en el término municipal de una gran factoría de aguas minerales y refrescos, llamada “Font Salem”.


martes, 26 de mayo de 2015

Ordesa, un siglo de protección. Parte 6

Las tres Sorores desde Vió
La acción erosiva glaciar labró un profundo cañón que deja al descubierto la estructura tectónica formada por una sucesión de cabalgamientos. Desde la Fuen Blanca donde ya hemos visto las particularidades kársticas del macizo como la surgencia, ascenderemos el último tramo de este profundo cañón y nos situaremos en el collado de Añisclo, impresionante mirador de los valles de Pineta y Añisclo. 
Dejamos atrás La Fuen Blanca y nos dirigimos hacia el norte. Durante toda la subida al collado se suceden una serie de cascadas,en total hasta seis grupos en este tramo de 550m de desnivel y algo más de dos kilómetros de recorrido en línea recta.  El río, al coincidir con pequeños pliegues de sinclinales y anticlinales se va adaptando al terreno. 
En las cercanías de la última cascada antes de llegar al collado, es posible observar una gran concentración de fósiles que evidencian el origen marino de estas areniscas, que se sedimentaron en una zona litoral poco profunda hace alrededor de 70 millones de años. 
Collado de Añisclo desde el Candón
Desde el collado (7h. de recorrrido desde San Úrbez) podemos asomarnos al valle de Pineta. Ambos valles (Añisclo y Pineta)presentan una marcada morfología en artesa propia de su origen glaciar. 

Fuen Blanca

Señalización del Parque Nacional 

Cascadas formando gradas hacia el Collado de Añisclo
 Si miramos hacia Añisclo podemos ver la perfección de la forma en U de la parte alta del valle y el cambio de su perfil aguas abajo.

Vista hacia el cañón desde la subida al collado.
El sarrio o rebeco (Rupicapra rupicapra pirenaica) es el mamífero más fácil de ver en nuestras excursiones por el Parque, así como la marmota (Marmota marmota) reintroducida en los Pirineos de Francia en los años 60.
Entre los 1600m y los 2350m, compartiendo espacio con los torrentes de montaña las pedreras y los riscos encontraremos chovas piquigualdas, gorrión alpino, treparriscos y acentor alpino; en el límite arbóreo el verderón serrano, mirlo capiblanmco,, roquero rojo, pito negro y piquituerto. En los prados alpinos la collalba gris, colirrojo tizón, bisbita alpino y pardillos. Entre los gramívoros, el avión roquero, el vencejo real, la alondra común y el pardillo. 
Sobrevolando nuestras cabezas, el águila real, buitre leonado, quebrantahuesos o el alimoche en época estival. 
Alimoche
A todos ellos se suma, en verano, el ganado que sube a los puertos. El pino negro (Pinus uncinata) especie que se cría en las crestas y laderas de estas montañas,acompaña a la flor de nieve (Leontopodim alpinum), a las gencianas y convalarias, prímulas y demás especies propias de estas altitudes.

Pinus uncinata

La flor de nieve (Leontopodium alpinum) muestra en sus brácteas(hojas especiales) en forma de estrella, una pilosidad blanca muy densa. La presencia de estos pelos en alta montaña le sirven para protegerse de la radiación ultravioleta, el frío y la desecación.
Flor de nieve



Gencianas
El Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, dentro del Plan de recuperación del quebrantahuesos participa desde el año 1989 con la instalación y el mantenimiento de puntos de alimentación suplementaria(muladares)en el sector de Escuaín. Estos puntos de alimentación permiten la supervivencia de ejemplares pre-adultos cuando las condiciones climatológicas son adversas y escasea la comida. El Parque también participa en los censos que se realizan anualmente. También se realiza vigilancia y seguimiento exhaustivo de las áreas de nidificación dentro del Parque y en las inmediaciones. 





Quebrantahuesos, alimoche, buitre leonado y buitre negro en el muladar de Escuaín

El Quebrantahuesos (Gypaetus barbatus) está incluído en la categoría "En peligro de extinción" en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas (Real Decreto 439/1990, de 30 de Marzo de 1990). Según la Ley 4/89 de Conservación de los Espacios Naturales y de la Flora y Fauna Silvestres, las distintas Comunidades Autónomas donde habita esta especie deben elaborar Planes de Recuperación que garanticen su supervivencia. 
En Europa sobreviven entre 110-120 parejas de las que 92 estarían en los Pirineos (España-Francia) y Grecia(continente y Creta). En los Balcanes sobreviven entre 1-3 parejas y algunos individuos solitarios. En los Alpes se lleva a cabo un Plan de Reintroducción y en 1997 nació en Francia el primer pollo en la naturaleza, en 1998 se reprodujeron en libertad dos parejas (Francia e Italia) que han producido sendos pollos. 
La población pirenaica española está compuesta por 77 parejas de las que 74 son unidades reproductoras compuestas por 49 parejas, 13 tríos y 2 cuartetos, lo que significa un número mínimo de 167 adultos.  

 No es difícil dentro del Parque, levantar la cabeza hacia el cielo y distinguir la figura de uno de estos preciosos ejemplares cuya silueta es inconfundible.

Hemos terminado así, con nuestro recorrido por el Cañón de Añisclo desde la parte baja del mismo (Desfiladero de las Cambras) hasta la parte alta (Collado de Añisclo).
Añisclo desde el Candón








domingo, 24 de mayo de 2015

Ordesa, un siglo de protección. Parte 4

Entre las grandes manifestaciones de la naturaleza, no conozco nada comparable a un desfiladero estrecho y variable, por el que se oye el estruendo de un torrente del que se puede beber. Las cascadas se escalonan; las rocas poseen el color rojizo de la fruta madura; se puede respirar el sano aroma de un bosque de coníferas. ¡Otros tendrán el honor de cantar la belleza de los precipicios que se tornan de bronce al atardecer, o las nieves perpetuas azuladas por la luna!. Por mi parte prefiero la suave sinfonía de las hojas cuando se agitan al silbido del viento en las crestas y me siento invadido por un extraño sentimiento divino que me emociona cuando acampo en pleno claro, sentado sobre un viejo tronco ante los chisporroteos de unas brasas, en medio de paredes fantásticas y bajo un cielo bien brillante...
                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                Lucien Briet



Llegamos al aparcamiento de San Úrbez (ereta Biés)  Accedemos al puente de San úrbez. El río Bellós transcurre espeso y verdoso por un desfiladero de piedra. 










El camino continúa por una pista forestal,sorteando un escarpe rocoso y nos conduce hasta la ermita de San Úrbez, una ermita rupestre creada aprovechando la oquedad de la pared calcárea.  Se accede a ella por una escalera.

 Existe un panel con pinturas esquemáticas que se encuentra en el exterior de la cavidad edificada debajo de la ermita y sobre la roca caliza a dos o tres metros del actual suelo que se excavó para construir la pista. Contiene una composición geometrizante de color rojo que integra dos cuadros redondeados y una línea curvada, con un apéndice en su parte superior, que queda cortado por un desconchado. Mide 10cm de larga y 9 cm de ancho. Casi no se aprecian.


Historia de la ermita
La Ermita de San Úrbez se cree que el origen es del siglo VIII, originada por la acción de las aguas subterráneas.
  San Úrbez, nació en Burdeos, en el año 702 y desde su juventud, como consecuencia de una guerra, fue llevado prisionero a España, donde acabó siendo esclavo de los moros. Tras conseguir su liberación, regresa por mar a su patria llevando reliquias de San Justo y San Pastor, cuyas memorias veneraba muy en particular. Ambos habían sido víctimas del martirio en Alcalá de Henares y San Úrbez se había desplazado allí en busca de sus restos con el fin de salvarlos de las profanaciones de los sarracenos. Regresa a Burdeos y se encuentra con su madre Asteria que también había sido esclava. Permanece con ella hasta que decide consagrarse a la vida contemplativa como un anacoreta. Abandona todo conservando únicamente las reliquias que guardaba y se dirige a los Pirineos. Agotado por el viaje, se detiene en Sercué. Pueblo habitado entonces por ricos propietarios que habían llegado hasta allí desde los llanos del Ebro expulsados por la invasión musulmana. Le ofrecieron trabajo como pastor. Primero se instaló en los pastos de Góriz, más tarde pasó a Vió. Fue en esta época cuando descubrió a los pies del Sastral (Sestrales) bajo las bordas de Aso, la cueva que ahora conocemos y a donde llegan los vecinos para recomendarse a él en cuatro romerías al año.
Sastral (Sestrales) desde Vió
Pasada la ermita encontraremos la fuente de San Úrbez y el desvío para hacer "El circuito del agua" o circuito de San úrbez que regresa al aparcamiento.

 Pero nosotros continuaremos avanzando atravesando estratos cada vez más antiguos con paredes de colores ocres y grises.

 El río Bellós discurre en este tramo más apacible entre pequeñas pozas y cascadas hasta llegar al puente de Sangons donde termina la pista forestal y empieza el sendero de montaña que recorre el cañón.
A nuestro paso, si estamos atentos y sabemos mirar, podremos observar entre la exuberante vegetación  y roquedos, algún reptil como el lución, culebra de esculapio, víbora áspid, lagartos ocelados....
Lución (Anguis fragilis)


En el Parque, están presentes una gran cantidad de reptiles, desde los más extendidos por la Península Ibérica hasta los endemismos propios de una gran cordillera como son los Pirineos. Los sectores más meridionales y de menor altitud acaparan la mayor diversidad de especies. 
La principal amenaza de los reptiles es la transformación de su hábitat y los factores derivados de la actividad humana. 


Lagarto ocelado (Timon  lepidus)







Culebra de esculapio (Zamenis longissimus)
Los    anfibios están representados por un urodelo: el tritón pirenaico (Calotriton asper) y cinco anuros: sapo común, sapo partero, rana verde o común, rana bermeja y rana pirenaica.
La rana pirenaica (Rana pyrenaica) y el tritón pirenaico son endemismos de la cordillera y la rana se distribuye sólo desde el eje del río Cinca hasta los primeros valles navarros en ambas vertientes. 
Como alguna de sus parientes más septentrionales, tiene la facultad de congelarse durante el invierno ayudándose de una combinación de azúcares y proteínas que genera en su organismo. 
Los anfibios están viéndose amenazados a nivel mundial por las nuevas enfermedades como el hongo (Batrachochytrium dendrobatidis)
La rana pirenaica es un vertebrado endémico de distribución muy restrictiva incluido en el catálogo de En Peligro según la Lista Roja de la UICN, Vulnerable en el Atlas y Libo Rojo de anfibios y reptiles de España, Sensible a la alteración de su hábitat según el Catálogo de Especies Amenazadas de Aragón y Vulnerable en el Libro de Especies en Régimen de Protección Especial.
Los principales problemas a los que se enfrentan los anfibios son: la canalización y entubado de muchos manantiales en cabecera por la creciente urbanización del Medio Natural, la contaminación de charcas y arroyos con productos químicos, la destrucción o abandono de numerosos puntos de agua que sustentaban las economías rurales y la introducción de especies alóctonas en el medio acuático. 
Rana pirenaica


Tritón pirenaico

Tritón en el agua


Ordesa, un siglo de protección. Parte 5

Pasado el puente de Sangons,  abandonamos la pista forestal y comenzamos a ascender por el sendero. Dejamos a nuestra izquierda el desvío al pueblo de Sercué (Valle de Vió) y continuamos acompañados en todo momento, por el río Bellós y la bóveda que forma la densa masa de bojes a nuestro alrededor.


Gorga Fumosa















A una hora de camino, llegamos a la zona denominada Cumaz donde encontraremos otra fuente para coger agua. 
Cumaz
Empiezan capas de roca compacta y espesas separadas por tramos algo más arcillosos. Esta composición produce tramos de valle escarpados y empinados que sortean el río. El recorrido transcurre por senda boscosa y va ganando altura suavemente entre bojes, hayas e impresionantes tejos amenizando las cuestas que preceden la zona denominada Selva Plana. Una vez allí, la senda desciende suavemente hasta un mirador acondicionado para poder asomarse al fondo del Cañón. Entramos en un hayedo que suavemente nos conducirá hasta La Ripareta (1405m). Llevaremos aproximadamente tres horas de recorrido.
Quien haya caminado por bosques de hayas sabrá que sus hojas tapizan la luz de una forma casi irreal. Éstas, están especialmente bonitas al comienzo de la primavera, recién brotadas. Tímidamente, el azul del cielo se asomará entre la maraña verde brillante que forman sus ramas encima de nuestras cabezas.

Ese verde intenso de sus hojas contrasta con los grises claroscuros de la corteza del árbol y sus ramas que se retuercen en formas imposibles. Merece la pena acercarse a ver el río en este tramo, pues engaña aparentando la misma serenidad que el camino,aunque el rugido de sus aguas nos hace sospechar que, en realidad, se precipita en cascadas espumosas horadando la roca, formando puentes naturales y pozas de un color azul turquesa o verde esmeralda. En La Ripareta confluye el barranco Pardina. El valle se abre y de camino a Fuen Blanca pasamos de un valle dominado por la acción fluvial a un antiguo valle glaciar. 
Según seguimos ascendiendo, el valle va perdiendo su carácter encajado y en forma de V propio de la erosión fluvial y toma la forma en U típica de los valles glaciares. 
La surgencia de la Fuen Blanca (5 horas de recorrido) es un manantial que surge directamente de la pared rocosa y representa el desagüe de un gran sistema de cavidades kársticas: el sistema de Punta de las Olas. 
En el amplio valle a los pies de la surgencia, se observan las primeras morrenas glaciares, cubiertas por los grandes canchales de derrubios actualmente activos. 

Para mí, uno de los enclaves más hermosos del Parque Nacional.

Fuen Blanca



 

viernes, 22 de mayo de 2015

Ordesa, un siglo de protección. Parte 3




Al Cañón de Añisclo podemos acceder desde el Valle de Vió o desde Escalona. Si lo hacemos desde el valle, hay que tener en cuenta que tenemos que dejar nuestro vehículo en “La Tella” aparcamiento que se encuentra aproximadamente a un kilómetro y medio del comienzo de los senderos del Parque, a los que podremos llegar a pie en una combinación de carretera y  un sendero habilitado. Desde Escalona, se accede por el Desfiladero de las Cambras (hay que tener en cuenta que esta carretera es de sentido único ascendente en época estival y Semana Santa). El Parque comienza en la Fuente de los Baños (700m) donde la carretera recorre una estrecha cornisa con el río encajado, carretera que se construye en el periodo entre 1942-1945 con presos de la Guerra Civil.

 Itinerario angosto del que todo el público puede disfrutar dado que se recorre (a no ser que elijamos otra opción) en coche. No es una ruta muy aconsejable en días de fuertes tormentas porque el agua cae torrencialmente por todas partes arrastrando consigo rocas sueltas y provocando algún desprendimiento que nos puede alcanzar. (En esas ocasiones, es mejor acceder desde el Valle de Vió). 
Asistimos a un claro ejemplo de erosión fluvial típica de gargantas calizas, con marmitas de gigante y paredes extraplomadas. Muchas de estas paredes están tapizadas por colonias de líquenes y vegetación adaptada a condiciones restrictivas de suelo y agua, siendo los roquedos y las gleras los que originan la mayor parte de los endemismos de nuestras montañas. 

Entre ellas, podemos encontrar la Grasilla 
(Pinguicula longifolia),
planta carnívora con hojas largas y pegajosas, colgantes, de color verde tierno, con las que atrapa los artrópodos que complementan su dieta. Entre las glándulas de sus hojas se encuentra un ácaro que se alimenta de los restos de animalillos que la planta no es capaz de digerir. 


Otra de las plantas que podremos observar es la Corona de Rey (Saxifraga longifolia) un verdadero espectáculo cuando está en flor. Planta perenne que puede vivir más de 30 años. Forma rosetas solitarias de hojas largas y estrechas, con dientes recubiertos de secreciones de carbonato cálcico que florece una sola vez, con largas y densas inflorescencias piramidales de color blanco, tras lo cual muere. Asistimos así a una de las más bellas despedidas de la naturaleza.


Fósil viviente, la "oreja de oso" (Ramonda myconi), propia de los climas tropicales del Terciario, es uno de los pocos vegetales capaces de rebrotar tras su total desecación, gracias a la acumulación de azúcares en el momento de la desecacón y que le impiden la muerte celular.



La Petrocoptis crassifolia, de tallos colgantes , curvos, con hojas opuestas carnosas de color verde glauco mate. Estudiada por la investigadora Begoña García (IPE), descubrió unos patrones de colores en las flores, en el espectro ultravioleta, que le sirven para atraer a sus polinizadores.




Si observamos con atención, descubriremos que tenemos ante nosotros un fenómeno de inversión térmica, con especies típicas de los encinares mediterráneos como el madroño, el durillo o el labiérnago. Hayedos, pinares, abetos, avellanos, tejos, tilos y arces en zonas más frías y húmedas que se corresponden con las zonas de menor altitud. Esto es debido a que el aire frío queda atrapado en el fondo del cañón taponado por una capa de aire caliente. El aire que se encuentra en el fondo no puede ascender puesto que es más pesado. La temperatura es pues más fría y húmeda en el fondo del cañón y más cálida a medida que ascendemos.

Poco antes de acabar la Guerra Civil, una orden Ministerial de 1 de Febrero 1939 otorga una concesión para aprovechamiento hidráulico en los ríos Aso y Bellós. 
Se llevan a cabo diferentes iniciativas de todo tipo apoyadas por los medios de comunicación aragoneses en contra de dicho aprovechamiento. Se constituyé el Comité de Defensa de Añisclo integrado por un gran número de ciudadanos aragoneses que proponen la ampliación del Parque para conseguir la salvar el Valle de Añisclo. La ampliación fue aprobada por ley 52/1982 el 13 de Julio de reclasificación y ampliación del Parque Nacional (pblicada el 30 de Julio). El Parque pasó a llamarse Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.

La única infraestructura hidráulica que se conserva es la estación de aforo en el kilómetro 7,5 de la carretera. 

En nuestro ascenso por la carretera, iremos acompañados en todo momento por el río Bellós, que en frenético descenso horada la roca caliza.





Llegamos así, hasta el aparcamiento de San Úrbez desde donde comenzaremos nuestro recorrido a pie por los senderos del Parque Nacional.