miércoles, 17 de septiembre de 2014

Los canutos, caminando en otras latitudes o quizá en otros tiempos

Como si de una máquina del tiempo se tratará, o quizá un transbordador en el espacio, así nos sentimos al adentrarnos en el canuto de Risco Blanco, un lugar mágico que tiene el acceso restringido y que guarda uno de los grandes tesoros del sur ibérico.

Un bosque de galería, un bosque de laurisilva, un territorio muy verde y frondoso, quizá selvático que contrasta con el paisaje que esperamos de Andalucía,  abrasador y seco. Nos hemos trasladado a otros lugares del globo terráqueo, a lugares más tropicales o quizá nuestro transbordador lo ha hecho en el tiempo, a antes de la glaciación, ya que con la retirada de los hielos el bosque subtropical húmedo desaparece de toda Europa, salvo en algunos lugares de España y Portugal.

Pero es cierto, nos encontramos en el parque natural de los Alcornocales en la provincia de Cádiz, donde podemos observar una joya de la naturaleza, quizá más espectacular que la propia laurisilva canaria que se recoge especialmente en el parque nacional de Garajonay. En el canuto de risco blanco podemos observar juntos especies subtropicales húmedas con otras del clima mediterráneo o incluso oceánico.

Quizá el gran tesoro de estas tierras, junto a los helechos sea el Rhododendrom ponticum subespecie baeticum, ya que fuera de estos bosques solo se conserva en algunos puntos del sur de Portugal

El interés botánico de este sendero mágico hay que añadirle los testimonios aún visibles de las vivencias y construcciones de otros tiempos, como hornos o bolinches, o  los lugares donde seguramente vivían de forma sostenible los moriscos, explotando el bosque.


Ya en otra ocasión en este blog hicimos una entrada más técnica sobre este sorprendente sendero, un lugar para no perderse. (enlace)


Nuestra excursión este día también terminaría de forma mágica, un atardecer en la playa de Bolonia, aquella playa que conquistaron para quedarse los romanos en Baelo Claudia, el sol se fue a descansar hasta la mañana siguiente por detrás de la gran duna.


No hay comentarios:

Publicar un comentario