La ruta del forat de Bernia

Libre Sancho Martínez (Sierra de Bernia)

                                                                                             

 La cueva (Forat de bernia) se encuentra casi a la mitad de la ruta circular, esta es de dificultad media y el tiempo estimado es de entre cuatro y cinco horas. Yo siempre voy por Altea, cuando aparcas el coche, te queda el macizo delante y el mar a tu derecha. Mi consejo es empezar hacia la izquierda. Por ahí tienes más distancia hasta el objetivo, puesto que casi le das la vuelta a la montaña, pero merece la pena. Cuando estás llegando, parece que el camino se termina, pero el punto negro se va haciendo cada vez más grande y se abre un circulo en la roca hecha de arcilla, marga y caliza (esta última es la que predomina), de aproximadamente un metro de altura, con cuidado de no abrirte la cabeza, hay que gatear o andar en cuclillas casi los 80 metros que mide, para pasar a la otra parte de la cresta. A la mitad del túnel aproximadamente, se empieza a ensanchar y coger altura hasta que se abre en una cueva preciosa, con raíces aéreas colgando del techo y unas vistas espectaculares del mar mediterráneo a mano izquierda. Entrando al litoral, la ciudad de Altea, más adelante, dibujando un pico adentrándose en el agua se ve el Parque Natural de la Serra Gelada, a su derecha Alfaz del Pi y sobrepasando las montañas del fondo se aprecian los enormes edificios de Benidorm y gran parte de la metrópoli. A la altura de esta, pero más al interior, se encuentra el Puig Campana (segunda montaña más alta de la provincia de Alicante) y a su derecha, el monte Ponoix. Estas vistas me recuerdan a la última escena de la película de “En busca del valle encantado” cuando los jóvenes dinosaurios consiguen llegar al valle. Es un contraste increíble y te proporciona una paz brutal. En mi opinión es el sitio más idóneo para descansar, relajarse, disfrutar de las vistas, almorzar, comer o cualquier cosa parecida, pues creo que no encontrarás uno mejor en todo el recorrido.

 Después de esta parada obligatoria, hay que seguir por la ruta circular, que quedaría más o menos un cuarto del total. Se sube y se baja relativamente poco el resto del camino y después de algún kilómetro ya estaríamos en el punto de partida. Solo quedaría bajar hasta el parking y decir adiós a una preciosa excursión.