El lugar de alojamiento "La Figuerola", un lugar tranquilo, con mucho encanto, en el corazón de las montañas de La Sierra de Llavaría, a solo cinco minutos de la playa y rodeado por un fantástico campo de golf que nos brindo la oportunidad de bautizarnos en este atractivo y difícil deporte.
Podríamos hablar del hotel, del entorno, de su spa (un poco limitado), pero después de pasar tranquilamente el fin de semana y al ir a pagar los suplementos en caja nos pidieron 0,9 euros por persona y noche, no lo entendimos y nos explico que era la tasa turística de Cataluña, en un principio los fondos recogidos son para mantener a Cataluña como destino competitivo y de calidad y los recursos obtenidos se dedicarán a sostener el fondo de fomento turístico.
En esta entrada quiero reflexionar sobre este impuesto:
- ¿A qué se destina el impuesto?, lo dicho, ¿lo habrá notado positivamente el sector?, creo que el sector que tiene que hacer grandes rebajas para ser competitivo en tiempos de crisis necesita más incentivos y menos impuestos fijos. ¿lo habrá notado en entorno?, desde su aplicación las políticas conservacionistas solo han sufrido que recortes, no se puede fomentar el turismo sin cuidar de los bienes más preciados como son el patrimonio ambiental y cultural.
Los Parque Nacionales en Estados Unidos cobran una Tasa, destinada a la conservación. |
- ¿Quién debe pagar el impuesto?. Al menos somos todos, toda persona que haga una estancia en cualquiera de los establecimientos o equipamientos turísticos, ¿no se ha beneficiado Cataluña de las políticas nacionales de incentivos para inversiones y mejoras en los entornos turísticos?, yo con los impuestos ya he colaborado ¿esto no es un sobre impuesto?
En el aeropuerto de Costa Rica para los turistas extranjeros hay una Tasa, se nos informa debidamente del destino del impuesto |
Queremos hacer una reflexión, ¿estas de acuerdo con esta Tasa?, ¿Quién la debería pagar en todo caso?
Yo por el momento me cuestionare otra vez volver a Cataluña y es una pena ya que su patrimonio tanto natural como cultural es muy sugerente pero este tipo de políticas no crean estímulos a los viajeros.
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