lunes, 4 de abril de 2022

LOS VIGILANTES DEL CIELO

 

En los bosques que se encuentran a los alrededores de Vilafranca del Cid existen una cantidad de aves rapaces que hacen de estos un lugar ideal para la fotografía de las mismas, ya que no es raro ver sobrevolando a buitres leonados, que son carroñeros y se presentan en gran número escudriñando el terreno en busca de comida; halcones peregrinos, a los que se puede encontrar en solitario o por parejas, a veces jugando entre ellos, lo cual es un espectáculo digno de ver; águilas culebreras y águilas reales, que por lo general se las ve en solitario, ya que son menos tolerantes a otras rapaces que no sean su pareja con la cual se emparejan de por vida al igual que el resto de rapaces. Este es uno de los motivos por el cual la sierra de la palomita está protegida, pese a que se permita la caza de ciertas especies, ya que en la zona hay cotos de caza, pero están destinados principalmente a especies de mamíferos y en temporada de cría de las diversas especies de rapaces se cesa la actividad cinegética. También está protegida debido a la gran cantidad de especies vegetales de gran importancia medioambiental que están presentes en la zona, y siendo estas la principal motivación de la micro reserva de flora de la rambla de las truchas.


Águila culebrera sobrevolando la sierra palomita, foto de Tasio

También cuenta con diversas especies de rapaces nocturnas que se puedes escuchar con claridad por las noches ya si se está en el camping del pueblo como si se da un paseo nocturno por la zona.

buzado ratonero en la sierra palomita, foto de Luis Fidel Sarmiento

Algunas de las especies de estas rapaces nocturnas son los búhos reales, las lechuzas y los mochuelos, que con su inconfundible canto inundan la oscuridad de la noche haciéndola si cabe más inquietante a la vez que bella.

búho real volando, foto tomada por Tomás de la Flor


Pese a que es difícil ver estas aves debido a su comportamiento nocturno ocasionalmente se los puede ver descansando apostados en los postes de la luz, en los postes de vallas cinegéticas o en señales de tráfico durante el atardecer, ya que es cuando empiezan a mostrar su actividad y también el mejor momento para observarlos.


buitre leonado volando, foto tomada por Juan Manuel


Introducción: UN PARAJE PARA RECORDAR

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