LOS CHOPOS.
En la bajada y entrada principal
del parque de la fuente de Chella se encuentran varios ejemplares centenarios
de chopos como dicen en el pueblo, aunque en verdad, la especie se llama
Platanus hispánica, que fueron plantados en el año 1884, en forma de
protección, ya que lo que hoy en día se denomina Parque de la fuente, antes era
toda una zona de cultivo de la cual se abastecían del rio Sellent, el cual su
caudal y su anchura eran mucho más de lo que es ahora.
Estos ejemplares de Platanus
hispánica tienen una altura de entre 15-20 metros y un diámetro de tronco de
1,5/2 metros.
Se abastecen de las aguas
subterráneas de la zona y también de la fuente de los 3 chorros, de la cual
hablaremos más tarde, que se encuentra a escasos metros de distancia de los
árboles.
Estos ejemplares nunca han sido
podados ni se han realizado trabajos de silvicultura en ellos ya que siempre se
ha dicho que está prohibido, que fueron declarados patrimonio, y esto es
peligroso, ya que, en los días de aire fuerte, caen algunas ramas y bolas del
árbol que, si consiguen alcanzar a alguien, le lastimaría mucho, además de que
sus potentes y gigantes raíces, que algunas llegan a alcanzar la bajada al río,
levantan el suelo y periódicamente se realizan reformas.
Estos árboles en su día,
consiguieron que el bar que había justo al lado, llegara a su máximo esplendor,
ya que conseguían darle un toque natural a la terraza del bar. Allí se
celebraban bodas, comidas, y todo tipo de eventos. Este tenía una pista de
patinaje de hielo, con vistas hacia los chopos, luego el bar fue a pique a
consecuencia de la gran riada, que destrozó todo lo que tenía delante y solo
quedaron impunes la fuente de los tres chorros y los chopos.
Su valor natural es elevado, ya
que por la zona no existen chopos de semejante altura y dimensiones, por lo que
es un recurso para fomentar el turismo en el pueblo y para fomentar la visitas
tanto al parque de la fuente, como el salto, como los restos arqueológicos próximos
a la zona del salto, las cuevas del turco, el matet, el terrero, como para
fomentar a que los visitantes se queden en las casas rurales de los alrededores
y puedan visitar cada uno de estos parajes cercanos a los chopos, ya que todas
las rutas hacia estos, comienzan en el mismo punto de partida, a la vera de
ellos.
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