Aunque hoy en día presenta un estado ruinoso, quizá el yacimiento mas destacable de nuestro paraje sea “El Castillo de la Encomienda de la Orden de Santiago”. Ocupado durante al menos diez siglos (s. IX-XVIII), esta construcción militar tras el tratado de Almizrra estaba integrada en la red de castillos de Millares, Quesa, Navarrés, Montesa, Moixent, La Mola y Xàtiva que garantizaban la seguridad del territorio.
Por su parte, sabemos que en febrero de 1244 Enguera se encontraba dentro de la zona de expansión de la corona de Aragón y que Jaime I ejecuta 17 prisioneros escogidos entre los habitantes de Enguera al no rendirse esta y entregar la villa. Posteriormente, un conflicto de intereses entre Alfonso de Castilla y Jaime I, se resuelve el 25 de marzo de este mismo año, entregando Jaime I la villa y el castillo a Fray Pelayo Pérez de Correa, maestre de la orden militar de Santiago.
Estará operativo hasta 1865, cuando la orden de Pedro IV ordena su demolición.
Por otro lado, el segundo yacimiento mas significativo que podemos encontrar en nuestro paraje, corresponde a la época íbera, siendo la única ciudad íbera de la Canal de Navarrés. Esta ubicada en el Cerro de Lucena con una orientación NE-SO y sobre una altitud de 110 metros para potenciar su carácter defensivo.
A su vez, por lo que respecta a su ocupación, estuvo habitada desde el s. IV a. de C. hasta el I d. de C. y tenía una extensión de 5 hectáreas.
Por último, como en todo paraje no podían faltar las cuevas, y desde la CV-590 tomando la dirección a Montesa tenemos justo al finalizar la subida la “Cueva de la Patatera”. Esta situada muy cercana a Enguera, en las faldas del Piquet y presenta una longitud de 15 metros, siendo de forma angosta y llevándonos en su interior a una única sala principal esférica con formaciones de estalactitas y estalagmitas, que se asemejan a una saca de patatas que da nombre a la cueva.
Finalizaría diciendo que muy próximo esta, esta la "Cueva de la Virgen", pero no recomiendo su entrada por riesgo de caída a distinto nivel.
Y con todo esto, me despido animándoos a ver en el siguiente apartado la ruta del agua: fuentes y acueductos.
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