sábado, 4 de abril de 2015

6. "Animaleando" en el Parque Natural de Ses Salines


Pasear por las salinas de Ibiza y Formentera es visitar el lugar de mayor riqueza de las Pitiusas, sobre todo en lo referente a aves acuáticas. Hay una gran diversidad de avifauna debido a la cercanía de medios tan diversos como las salinas, los islotes, la garriga y los acantilados marinos.

El flamenco (Phoenicopterus ruber) es el ave más representativa del Parque Natural de Ses Salines, aunque han sido censadas unas 210 especies de aves en la zona de la Reserva Natural.

La mejor zona del parque para observar los flamencos, son los estanques del Codolar, donde se concentran centenares de individuos, el estanque de Sal Rossa o Es Cavallet. Entre los meses de agosto y octubre llegan centenares de ejemplares, y unos trescientos pasarán el invierno aquí. 

Los flamencos son aves muy sociales que crían en colonias, a veces muy numerosas. Su nido es una pequeña torre de lodo de unos 30 cm de altura, con una ligera depresión en la parte superior, donde depositan un solo huevo, que queda protegido de las oscilaciones del nivel del agua. El macho y la hembra incuban el huevo y cuidan al pollo cuando nace.

El pico del flamenco es un perfecto aparato de filtración. En  aguas poco profundas, remueve el lodo del fondo, balanceando la cabeza y las patas. Al tiempo, se llena el pico de agua terrosa mezclada con pequeños invertebrados acuáticos, que se quedan en la boa tras expulsar el agua con la lengua.


La visión de los esbeltos flamencos en los estanques de Ses Salines es una imagen inseparable de la primavera en las Pitiüses, que eligen estas aves zancudas para hacer escala en sus migraciones. Hay una segunda oportunidad para verlas, ya que volverán a pasar por la isla de vuelta de África en otoño.

Se encuentran en la zona otras aves marinas como Calonectris diomedea, Hydrobates pelagicus, Phalacrocorax aristotelis, Larus audouinii y L. michahellis.

Otras aves raras para el mediterráneo pueden verse en la zona en invierno o en migración como son Morus bassanus, Sterna nilotica, S, sandvicensis, S. hirundo, Stercorarius skua y Childoias hybrida.

Mucho más raros y observados esporádicamente en Ses Salines, son Rissa tridactyla, Uria aalgae, Alca torda o Fatrercula arctica.

Entre las aves destaca la presencia de la Pardela balear (Puffinus mauretanicus) endemismo de este archipiélago que se encuentra incluido en el categoría de máxima amenaza (Pelígro crítico: CR) tanto en el listado de UICN como en le Libro Rojo de las Aves.


Habría que destacar la presencia ocasional de la Tortuga boba (Caretta caretta ) catalogada en el Libro Rojo de la UICN como Vulnerable (A1abd) y del Delfín mular (Tursiop truncatus) incluido en la categoría de Vulnerable, tanto en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas como en el Libro Rojo de los Mamíferos de España.


Las poblaciones de reptiles son de un interés excepcional. En los islotes e islas mayores han sido descritas hasta catorce subespecies endémicas de Podarcis pityusensis, lagartija endémica de las islas Pitiusas.

Esta lagartija es una lagartija robusta, con cola larga, que mide aproximadamente el doble del cuerpo, que no suele ser aplanado.
Su cuerpo es generalmente verde, aunque la evolución ha permitido que se identifiquen ejemplares marrones y grises. 
Una línea vertebral negra y otras dos a cada la do suelen cruzar su cuerpo. Mientras que su cola es gris, su vientre tiende a ser blanquecino, o de un tono amarillo incluso naranja.
En las subespecies encontradas en Formentera, sufre esta descripción algunas variaciones, ya que se han encontrado incluso especímenes de color azul cobalto.

Seguiremos disfrutando del entorno en próximas entregas...

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