La Guerra Civil. Línea XYZ. Patrimonio de lo que nunca debió suceder

El tiempo siempre deja huella. En el Collado de los Refugios, a un kilómetro de la cima de La Rápita, nos encontraremos un gran surco que atraviesa todo el collado, como una cicatriz de lo que fue la Guerra Civil.

Trincheras en el Collado de los Refugios.
Fotografías: propias

Mucho tendrían que contar esos surcos centenarios que sirvieron de escudo de balas, esas construcciones de piedra que no son los típicos bunkers de hormigón armado, sino un sistema de defensa constituido por una enrevesada red de trincheras y pequeñas fortificaciones adaptadas a la orografía del terreno, construidas con la técnica de la piedra en seco. Se construyó en junio de 1938, y durante casi un mes trabajaron en ella 5.500 hombres día y noche hasta finalizar su construcción.

Nidos de ametralladora construidos con piedra seca.
Fotografías: propias

Estas trincheras y nidos de ametralladora pertenecen a una serie de líneas de contención y fortificaciones entre el sur de Castellón y el norte de Valencia, la llamada Línea XYZ. Fue la última línea de defensa republicana para proteger la provincia de Valencia y la misma capital, de La Ofensiva de Levante,  también conocida como Campaña del Levante, lanzada por el ejército franquista. Valencia fue sede desde noviembre de 1936 del gobierno de la Segunda República Española.
La línea se extendía a lo largo de unos 150 kilómetros, desde Almenara, en la costa del mar Mediterráneo, hasta Santa Cruz de Moya (Cuenca), constituyendo una enmarañada línea de posiciones que serpenteaba por las provincias de Valencia, Castellón, Teruel y Cuenca.

Línea XYZ desde Almenara a Santa Cruz de Moya.
Ilustración: https://deautor.hispanianostra.org/un-paseo-por-las-trincheras-de-la-linea-xyz/

Línea XYZ en su paso por la zona de La Rápita
y las divisiones del ejército franquista que realizarón la ofensiva.
Ilustración: es.wikiloc.com

En marzo de 1939, hasta el final de la Guerra Civil con el frente muy debilitado, se mantuvieron resistencias con el objetivo de dar tiempo a escapar a aquellos que lo deseaban. El 29 de marzo, las tropas de Franco ya controlaban la capital valenciana y todo el entramado defensivo de la Línea XYZ.

 

Trinchera entre vegetación en las proximidades de la cima de La Rápita.
Fotografías: propias Nido de ametralladora en la cima de La Rápita.
Fotografías: propias

Las trincheras próximas a la cima de La Rápita se encuentran entre una densa vegetación de pinos, carrascas y algunos rebollos, llegando hasta la misma cima donde podemos encontrar un nido de ametralladoras.

Nido de ametralladora en la cima de La Rápita.
Fotografías: propias

En la zona de acceso a La Rápita, por el Barranco del Cañar, antes de llegar al Collado de los Refugios, podemos divisar cavidades en la montaña que servían de refugio y almacén.

Fotografía: propia

En la vertiente sureste de La Rápita, también encontramos vestigios de la Guerra Civil, ya sea en forma de trincheras o de nidos de ametralladoras. En pleno centro de Espadán, se encuentran dos cimas de 871 y 875 metros de altura, conocidas por sus formas, con el nombre de “Las Tetas” o “Las Gemelas”, que se pueden divisar en los ascensos hacia la cima de La Rápita.

Vistas desde La Rápita hacia la zona de "Las Tetas".
Fotografía: propia

Eran posiciones estratégicas para el ejército republicano, por ello el 10 de julio de 1938 comienza el ataque sublevado con el objetivo de tomar ambas posiciones. Tras varios días de combates, el ejército sublevado se hizo con una de las cimas. Y así, hasta el final de la Guerra Civil, cada bando ocupó una de las colinas.

Disfrutaremos de una ruta de senderismo con gran valor histórico, conociendo uno de los tramos de la mayor línea defensiva de tota la historia del Estado Español, donde desafortunadamente se vivieron asaltos brutales por terrenos montuosos.

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