MUROS DE PIEDRA SECA 

Podemos recorrer los diferentes muros de pared seca que separan artigas y caminos o, incluso, con caminos encima suyo, por la gran anchura que tienen. 

Los muros de piedra seca, levantados con las rocas volcánicas del terreno, definen las artigas, hacen de límite de los campos de los diferentes propietarios y limitan los caminos.

Se construían en seco, sin ningún tipo de cemento o argamasa, con rocas volcánicas de medida de bloque colocadas las unas sobre las otras, de forma que su propio peso los aguantara. Algunos de estos muros pueden llegar a hacer 2,5 metros de altura y la longitud de los muros del Bosque de Tosca se estima que es de unos 50 km. 

En la base, como cimientos, se colocaban las rocas más gordas y pesadas, y en la parte central, bloques y rocas más pequeñas para inmovilizar y falcar el muro. 

El cascote (recubrimiento interior) era de lapil·li (rocas volcánicas de medida más pequeña), y como coronamiento del muro se ponía una única roca horizontal o varias rocas en disposiciones diferentes. Los muros de piedra seca han acontecido de gran importancia para los seres vivos. 

Son refugio para la fauna, que hacen la madriguera o el nido, y son también hábitat de numerosas plantas rupícolas, algunas atraídas por la sequedad de los muros soleados, y otros, por la humedad de los márgenes obacs. Dos plantas amenazadas y protegidas, un musgo (Oedipodiella australis) y un helecho (Cheilanthes maderensis), solo pueden vivir en estos muros.

 

El proceso de "artigatge" comportaba llevar a cabo las actividades siguientes:
1. Cortar la masa boscosa y arrancar raíces 
2. Quemar el monte bajo y la leña, y esparcir las cenizas como abono.
3. Sacar piedra la artiga extrayendo los bloques de basalto del suelo. Este gran volumen de rocas volcánicas retirado de los campos solo se podía utilizar para construir los muros de
piedra seca que servían para limitar las artigas y los caminos.
4. Preparar el terreno para el cultivo: nivelar, labrar...
5. Plantar y cultivar

1.Fundamentos, 2. cuñas, 3.Piedras pequeñas, 4.Piedra travesaña, 5 piedra de coronamiento o también con rocas en horizontal

Adjunto un video donde todos aquellos quienes quieran aprender a construir con piedra seca o simplemente quieran hacer un taller en buena compañia, para pasar un dia diferente, el perfil más habitual de quienes asisten a estos encuentros suelen ser personas locales quienes son poseedoras de terrenos delimitados con piedra tosca, en estado deteriorado y les motiva la idea de reconstruirla según la tradición sin el uso de materiales de construcción actuales. 

Adquirir conocimiento y cultura de estas prácticas ancestrales, eso si hay que ir bien equipado y con ganas de trabajar, yo he coincidió con ellos aunque no para participar en su taller, tengo ya cierta práctica y unas nociones, he reconstruido varios tramos de muero en mi propiedad, con la experiencia de mi amigo Isidro, un señor que también os he introducido en una de las entradas y nos hablará de ello, es realmente un trabajo duro que debes tomarte tus descansos y por supuesto un buen desayuno, muchos terminan exhaustos, lo ideal es el uso de carretillas y que se dividan en grupos según tu condición física vayas reuniendo piedras de tamaños más o menos grandes y lo más importante tal como vemos en las imágenes y el video nos enseña, su colocación és crucial, el secreto es repartir el peso en una base ancha, ir subiendo ligeramente con una forma piramidal y las piedras más pequeñitas las usamos para rellenar el interior del muro.

CABAÑAS

En el punto 19 (La artiga de en Colista) podemos observar una de las barracas de piedra seca que conserva la morfología más típica de la zona. 

Las cabañas son pequeñas construcciones cubiertas que sirven de cobijo temporal a las personas que trabajan en el campo o para guardar las herramientas. 

En la zona del Bosque de Tosca, se han contabilizado cerca de un centenar de barracas de piedra seca, relacionadas con "l'artigatge" de las coladas de lava volcánicas. La construcción de las barracas se basa en el cierre progresivo del espacio con las piedras desde la parte baja. La cubrición final se hace con losas que conforman un techo plano. Muchas de las barracas se construían adyacentes a los muros y en la mayoría de los casos con un dintel a la puerta de entrada. 

Como ya he encionado en otra entrada En el Parque de Piedra Tosca algunas barracas tienen su propio "bufador" en el interior. 

Anécdota: Cuando llegue a la zona me perdia por los laberintos dando pasos con mi perrita, me fascinaba ese lugar y sus diferentes estaciones.

fui descubriendo las diferentes cuevas por casualidad, realmente no miraba itinerarios preferia caminar sin rumbo e ir descubriendo ese sector sin pautas, al pasar por una de esas cabañas en uno de los sectores más ocultos del Parque sin señalizar, salía un perro a proteger su territorio y se enfrentaba a mi perrita, pues al final establecieron un pacto de respeto mutuo por recurrencia.

Fruto de mi actitud de no juzgar a nadie por las apariencias, establecí amiguismo con una persona muy peculiar, realmente me cautivo nivel cultural al establecer mis primeras  conversaciones con el Joan se refugiaba en sus libros, leía mayor parte de su tiempo, y aún guardo anotado en un papel una recomendación suya ODAS,CANTO,EPODOS, HORACIO, de hecho Joan era licenciado en literatura y también pintor, pero sus últimos año por circunstancias de la vida los vivió como un ermitaño, cansado de esta sociedad, decidió hacer de una de esas cabañas de piedra su hogar y allí vivió varios años, acompañado de su perrito, cultivando una franja de tierra para poder comer, e ir sobreviviendo a duras penas aceptando gratamente la caridad de los lugareños que realmente llegaron a conocerlo, otros le evitaban cruzar ese sendero para no cruzarse con un loco troglodita, vivió hasta los 60 y pocos años soportando las inclemencias del tiempo y sin cuidar demasiado, por no decir nada sus problemas de salud, cada otoño me acuerdo de él, cuando voy a recoger las castañas que custodiaba mientras vivió ,esperando días de ventisca para poder recoger y asarlas a las llamas, también las setas de un álamo viejo a pies de su cueva que el mismo consideraba su mejor manjar, y me decía sonriendo puedo coger setas sin levantarme de la cama.

 -OSCAR RUIZ CALIZ-