Pla de Ses Figueres sembrado de viña. Foto museo. |
Estado actual del pla de Ses Figueres. Foto propia. |
Esta historia arranca en torno a 1890 cuando aprovechando la ley de colonias agrícolas de 1868 se intenta establecer una población estable en la isla para el cultivo de las tierras. El propietario Miguel Humbert i Burgués (1883-1891) quería labrar todos los terrenos aptos para el cultivo, así como construir diversas edificaciones para alojar a los colonos. Pero las deudas acumuladas por la familia Humbert paralizaron la iniciativa.
Jacint Feliu i Ferrà , que ya había hecho negocios con Miguel Humbert se hizo cargo de las deudas a cambio de la propiedad de la Isla de Cabrera.
La familia Feliu quería convertir Cabrera en una explotación agrícola moderna , siguiendo las pautas marcadas en las grandes fincas de Mallorca. Las cepas, árboles frutales,almendros, algarrobos, e higueras tenían que ser las principales plantaciones de la explotación agrícola. También se dedicó una pequeña parcela a la construcción de un huerto y a la plantación de pasto para la alimentación del ganado ovino y bovino. La explotación se complementaba con la cría de cerdos y la fabricación de vino.
La explotación agrícola de los Feliu dio sus frutos año tras año. Se fundó una pequeña población en torno al puerto que se bautizó con el nombre de Villa Cristina en homenaje a la reina regente. Se construyeron nuevas edificaciones como el Celler, Casa de los Feliu y un pequeño oratorio dedicado a Santa Petronila, nombre de la esposa de Sebastia Feliu, que fue cedido a la iglesia .
Sebastià Feliu y su esposa Petronila de visita en Cabrera. Archivo família Feliu. |
Imagen de la capilla a principios del siglo XX. Archivo Feliu. |
Pero la filoxera , que ya arrasaba los campos de vid de Mallorca llegó a Cabrera cuando ya se habían iniciado las gestiones para sustituir las viñas por cepas americanas.
Este ambicioso proyecto se completó con un servicio marítimo entre Palma y Cabrera. Con la adquisición del vapor Cabrera , con ello se redujeron los costes de transporte de productos y con un aporte extra de ingresos por transporte turístico y por el pasaje de la población residente del destacamento militar y personal del faro.
Con la muerte de Jacint Feliu en 1903 la explotación agrícola de la isla se dio en arrendamiento a diversas familias siguiendo la misma costumbre que se extendía por Mallorca.
La familia Suñer fue una de ellas , durante 60 años fueron los arrendatarios de las tierras,incluso después de la expropiación de la isla a los Feliu por parte del estado y pasase a ser propiedad militar en 1916.
Damià Suñer y Jerónima Mas , “amos” de Cabrera aproximadamente desde el año 1914. Archivo familia Vidal. |
Segun explica Francisca Suñer en su libro “Viure a Cabrera”
El arrendatario , Damià , se instaló en la casa del payés y con la ayuda de un pastor y unos mozos de labranza , sembraba más de 70 hectáreas, cuidaba 300 ovejas y criaba 9 o 10 cerdos. Los sembrados se labraban con un arado romano. Los calurosos días de verano, hileras de payeses , hoz en mano, segaban los campos de mies. Una mula con anteojeras tiraba del trillo abriendo las espigas. El trigo se trituraba en la tahona. Cada semana mi padre amasaba el pan, un pan moreno oscuro.
La familia Suñer en 1968 contrató a Juan Vidal Garau como payés, que según la tradición era el que hacía el trabajo y entregaba la mitad de la ganancia al “amo” en este caso el arrendatario los Suñer. Juan Vidal Garau y María Vicens Burguera, llegaron junto a su hija María, de 10 meses, la noche del 24 de julio de 1968. A los pocos meses nació Cati Vidal nuestra actual cantinera y enlace militar en la isla, todo un referente y parte de la historia de Cabrera. Su padre iba a trabajar como payés para la familia Sunyer, arrendatarios de Cabrera. Se iba a encargar junto a su esposa de cultivar la tierra y atender el ganado, compuesto principalmente por cerdos y ovejas.
Como anteriores payeses cultivaban y sacaban de la tierra todos los recursos posibles, para los que no conocéis Cabrera os diré que la tierra es poco fértil y pedregosa, es difícil sacar rendimientos, se complementaban con la cría de cerdos y ovejas. La caza era uno de los principales aportes de comida que llevaba su padre a la mesa, conejos y todo tipo de pájaros.
Foto de la família Vidal a los pocos años de vivir en Cabrera. Archivo família Vidal. |
Después de unos años, la tierra no daba y la familia Sunyer se fue de la isla, y el padre de Cati empezó a trabajar para el Ministerio de Defensa. Su cargo era de panadero-leñador. A partir de 1975 lo combinó durante muchos años con el oficio de pescador comprando un llaut que hoy en día continúa empleando su nieto Juan.
Con la declaración de parque en el 91 se prohibieron la mayoría de las actividades que realizaba Joan Vidal y se convirtió en el último payés de Cabrera.
Joan Vidal " Es pages" junto a su llaut Tres Hermanos cargado de corderos . Arcchivo família Vidal. |
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